Compartimos con ustedes semblanzas del terruño, formas personales de pintar la aldea.
Hoy: Blanca Demaría
En mi alma habitan dos terruños, el natal y el adoptivo.
Las Ovejas, mi pueblo adoptivo, es un valle cordillerano que dista a 500 km de Neuquén capital.
Es un lugar mágico, inundado por culturas ancestrales, y en sus paisajes se entremezclan la trashumancia y la cueca.
En este hermoso rincón cordillerano se entraman no sólo ocres y marrones, de tintes de plantas nativas en sus artes, sino que también allí fluye un acerbo ancestral de incalculable valor.
Este lugar, con pinceladas de pinares verdes y ñires nativos, está abrazado por dos cordilleras, la del Viento y la de los Andes.
Por siempre: mirada marrón y alma de cordillera.
Blanca Demaría
En: Poesía de Norte de Neuquén AAVV (2024), Centro Editor, CeDIE, CPE.