Compartimos con ustedes semblanzas del terruño, formas personales de pintar la aldea.
Hoy: Andrés Aburto
San Martín de los Andes es la ciudad en la que vivo y nací, todavía se conservan ciertas costumbres entre quienes llegaron y quedaron y por quienes viven desde siempre, casi como un pacto tácito que se adhiere a su esencia de aldea de montaña que pasó en pocas décadas a ser una de las ciudades turísticas elegidas por muchas personas en el mundo.
Desde ver calles céntricas de tierra hasta grandes edificios con una altura óptima para cuidar el patrimonio histórico material y cultural, he notado cómo el pasar del tiempo va sujeto a la forma con la cual uno ve el lugar donde vive, y la rapidez de los días es tan grande que pocas veces me he puesto a pensar en el alrededor y su historia. Pero cuando aprecio el paisaje actual, puedo decir que soy parte de un pueblo hecho ciudad, con artistas que se encargan de sentir sus alegrías y tristezas, sus bellezas y bondades, sus secretos y quizás lo que el futuro proponga por delante.
En: Poesía del Sur de Neuquén AAVV (2024), Centro Editor, CeDIE, CPE.