El tiempo dedicado a la lectura es mágico: enriquece la experiencia y la convierte en un momento placentero. Y esto se potencia si el prodigio ocurre en la biblioteca y con libros de calidad estética y literaria incuestionable.
Lo descripto anteriormente, sucedió… ¿dónde? ¡En la biblioteca de la escuela primaria N° 156 de Zapala! Su bibliotecaria, Viviana Ceballos, compartió lecturas de la colección Leer por leer con chicas y chicos del establecimiento. Durante el placentero momento quedó demostrado que no existen recetas ni mandamientos a la hora de generar deseo por la lectura en las infancias; sólo basta con poner a su alcance buenos libros.