Homenaje a maestras y maestros de Neuquén

Isidro Belver y Elva Saddi

Elva Saddi

La carrera docente de Elva Saddi comenzó en la escuela primaria Nº 54 La Patagonia, ubicada en el departamento Zapala, establecimiento donde se desempeñó de 1979 a 1984. Lo primero que recuerda Elva es la vieja pasarela sobre el arroyo Covunco por la que se llegaba a la escuela. En esa localidad, nuestra docente gestionó viviendas que fueron producto de un relevamiento poblacional por medio del cual muchas antiguas familias obtuvieron su casa propia. Por aquellos años también se inició el tendido de energía eléctrica para la comunidad, mientras que la huella de a poco se fue convirtiendo en camino: comenzó a funcionar un sistema de transporte, el colectivo, por primera vez.

Elva nos cuenta que

“Estos avances fueron logrados gracias a don Amado Sapag, intendente de Zapala, que siempre tuvo una relación de compromiso con la escuela y la comunidad”  

Maestra y directora de varias escuelas de la provincia del Neuquén, Elva nos dejó algunos conceptos sobre su experiencia educativa:

“El docente en aquellos años era el nexo entre el gobierno y la comunidad en la que estaba inserta la escuela; a través de ese vínculo es como se lograron beneficios tales como viviendas, agua, energía eléctrica, rutas, pasarelas. La primera Micro-central Hidroeléctrica realizada en Laguna Auquinco, donde está emplazada la escuela primaria Nº 251 (entre 1984 y 1986) fue mi gestión. Tuve que enseñarle a la comunidad a utilizar la energía, desde apagar y prender la luz. Recuerdo que trabajadores del EPEN llegaron a la escuela para trabajar en equipo y transmitir los beneficios de la electricidad, como por ejemplo el uso de la plancha y la heladera. Al principio la comunidad no estaba muy de acuerdo hasta que vieron los beneficios que producía en la escuela, y fueron aceptando e incorporando lo que para ellos era una novedad”

En efecto, aquélla fue la primera Micro-central Hidroeléctrica de la provincia. Todo gracias al impulso de Elva, quien también fue coordinadora del Distrito Hueney. Pero ahí no concluye la vasta trayectoria de nuestra docente. En 1987, el Consejo Provincial de Educación la nombra directora de la escuela anexo a la escuela primaria Nº 150; a partir de la gestión de Elva, se crea la nueva escuela con el Nº 178. El barrio y la escuela llevan el nombre Dr. Gregorio Álvarez. Es decir que, prácticamente, las familias que vivían en el barrio llegaron junto con la escuela. En 1987, por concurso de ascenso, se trasladó para ejercer como directora de la escuela primaria Nº331 de Caepe Malal, cargo que ocuparía hasta el año 2000. De aquellas experiencias, Elva nos cuenta:

“Con la comunidad creamos la Cooperadora. Yo no sabría decir a cuál escuela quise más, porque todas están en mi corazón.”

Durante su gestión al frente de la escuela de Caepe Malal fue nombrada directora general de las escuelas albergues y rurales de la provincia del Neuquén. El Presidente del Consejo Provincial de Educación era el maestro Isidro Belver. Elva organizó dos Encuentros binacionales y uno trinacional, Italia, Argentina y Chile, para la Integración de las Escuelas.

Su hijo, José Luis Saddi, una de las personas que más conoce la visión y el modo de pensar de Elva, agrega al respecto:

“Mi mamá quiso romper con el estigma de que la gente que estudiaba en el campo no podía seguir el secundario ni la universidad. Trabajaba hasta las dos o tres de la mañana haciendo notas para gestionar ante provincia, nación y municipios. Sus gestiones no se limitaban a lo escolar, consiguió viviendas, agua, gas, electricidad, ropa y libros. Visitaba a las familias y les planteaba la necesidad de que sus hijos sigan estudiando, logrando el compromiso de muchos de ellos con la actividad escolar. Respetaba sus costumbres y organizaba fiestas camperas para fortalecer los lazos comunitarios. Una mujer comprometida, que se plantaba frente a los burócratas, con los derechos del niño bajo el brazo. Sus alumnos y alumnas la recuerdan con cariño y reconocimiento”

Elva vive en la ciudad de Zapala. La excepcional maestra, nacida en la localidad riojana de Chepes en 1940, se emociona cuando recuerda cada una de las escuelas y a sus ex alumnos y compañeros docentes.

Elva y su nieta Nahir
Acto de cierre de ciclo escolar en la escuela primaria Nº 54 La Patagonia. 1979
Elva Saadi: cedidas por la docente

Isidro Belver

El maestro Belver nació en Almería, España, y llegó a nuestro país en 1952 con sus padres debido a la difícil situación que se vivía en toda Europa después de la guerra. Tenía apenas cinco años de edad.

Belver nos cuenta acerca del épico arribo a la Argentina:

“La llegada al país fue directamente a Cutral Có, en el año 52. Era un asentamiento de los que trabajaban en YPF, que era la suerte que todo el mundo buscaba: la de tener trabajo”

“Con la familia estudié en Cutral Có, y luego seguí mis estudios en Fortín Mercedes, provincia de Buenos Aires, internado en el Colegio de los Salesianos con la vocación de sacerdote, donde pasé casi diez años”

“Allí terminé el básico y después volví a Cutral Có, e hice el cuarto año de magisterio en Zapala. Y en el quinto año me recibí de maestro en otra localidad de la provincia de Buenos Aires”

“Con eso me volví a Cutral Có, y gracias a una charla con el obispo De Nevares, decidí seguir en el seminario. Estuve dos años en filosofía, en el seminario de La Plata, y tres años de teología en el seminario de Córdoba, hasta que De Nevares me ordenó sacerdote en 1971”

“Ahí me dediqué a estar en el obispado, acompañándolo. Y luego salí hacia el ámbito rural: Piedra del Águila, El Malleo, Junín de los Andes y Las Lajas. Y finalmente el obispo me destinó a Andacollo como sacerdote misionero de todo el norte, ya que los salesianos no tenían gente y estaban solamente en la parroquia de Chos Malal”

“Cuando dejé de ser cura me dediqué a la docencia en Huinganco y Andacollo. En Carri Lil, cerca de Aluminé, estuvimos un año, y también como maestro organizador de la escuela de Charra Ruca, la primera forestal y de jornada completa.”

Acompañado de su esposa, Yolanda Esther Fuentes, en 1982 Isidro se hizo cargo de la escuela primaria Nº 145 de Carri Lil. El establecimiento no tenía gas, agua ni ventanas con vidrios… la empresa se retiró del establecimiento sin terminar la obra. El único personal que había era Juan Caitruz, vecino y portero, y Amaranto Aigo, histórico lonko de Ruca Choroy. Verdaderamente todo un desafío: había que habilitar las aulas vacías para cuarenta y cinco alumnos de todas las edades, la vivienda de maestros, los baños… Pero nada los detuvo. Comenzó a funcionar la escuela con Yolanda como maestra de manualidades y con Amaranto como Maestro de Huerta, quien pudo sembrar varias verduras pero especialmente papas, para lo cual aró una vega seca cercana a la escuela. Fue ésa una gran cosecha: algunas papas pesaban más de medio kilo, tanto, que algunas llegaron a casi los dos kilos.

La mirada de Isidro sobre aquella primera experiencia es clara y contundente:

“Con ingenio y apoyo de las familias logramos traer el agua con mangueras desde una vertiente que estaba a quinientos metros, lo que nos permitió habilitar los baños”

“Luego se acondicionó la cocina a leña y también llegó la luz gracias a un generador que logramos poner en marcha después de empalmar varios cables y circuitos; por primera vez, del Distrito vinieron a pasar películas con las antiguas Betamax”

“Mi gran satisfacción fue que ese año lo nombraron a Amaranto Aigo maestro de lengua; así, los chicos tenían la posibilidad de hablar la lengua mapuche”

Isidro luego siguió su frondoso camino dejando huellas en otras escuelas rurales, hasta que en 1991 fue nombrado presidente del Consejo Provincial de Educación del Neuquén. Maestro rural por excelencia, escritor, historiador, poeta, investigador, periodista amante del norte neuquino y su cultura, una figura querida y respetada por un pueblo que reconoce su talento, sin embargo no quiere hablar de su trayectoria como docente. Nos dice, con una modestia que armoniza con la estatura de su legado, que “hay muchos docentes en la historia de Neuquén que hicieron una gran obra, hablen de ellos…” Sin dudas, un ejemplo de docente y de ser humano este gran maestro rural.

Fotos de Isidro Belver en la Escuela de Carri Lil. Fuente: Isidro Belver

Fuentes

Base de datos Historia de las Escuelas CeDIE

Neuquén Informa

http://neuquentur.gob.ar/es/notas-de-color/49770/isidro-belver-un-misionero-de-la-historia-neuquina/

Fotografías

Isidro Belver: perfil de facebook de Isidro Belver

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